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Displacia del desarrollo de la cadera

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¿ECOGRAFIA O RADIOGRAFIA?

Con la amplia disponibilidad de la ecografía y los avances tecnológicos, el uso de ésta para el estudio de anomalías del sistema músculo esquelético ha crecido ampliamente y su capacidad para caracterizar con facilidad las partes blandas, cartílago y componentes vasculares del sistema músculo esquelético, es por ello que ha situado a este método como "procedimiento de primera elección" para muchos procesos específicos como la Displasia de Cadera en neonatos.

Esta entidad anteriormente denominada Luxación congénitas de cadera incluye un abanico amplio de anormalidades, produciéndose la mayoría tras el nacimiento aunque otros lo pueden desarrollar más tarde en la infancia. Tiene una incidencia aproximada de 1,5 cada 1000afectando más frecuentemente a las mujeres que a los varones en una relación 4 a1, 5 a 1.

El diagnóstico se sospecha clínicamente en primer lugar. Su diagnóstico y tratamiento precoz es importante para un desarrollo normal de la cadera. La radiología ha sido el método convencional para su diagnóstico, sin embargo esta no es segura en neonatos o lactantes porque la cabeza femoral y el cartílago acetabular están sin osificar, haciendo difícil determinar la relación entre el fémur proximal y el acetábulo. La posición de la epífisis debe ser inferida por la orientación de la metáfisis femoral. La osificación de estas estructuras se produce entre el tercer y octavo mes de vida pudiendo recién a esta edad determinar las relaciones correctas a través de este estudio.

La ecografía es superior a la radiografía por su capacidad de visualizar estructuras no osificadas y de obtener información que antes tenía que ser inferida mediante datos indirectos, permitiendo de esta manera un diagnóstico precoz en la Displasia de Cadera. Por lo antes mencionado se puede afirmar que la ecografía se recomienda como estudio de elección para la evaluación de los recién nacidos y de los lactante, sumando a esto los beneficios de no ser este un estudio sin radiación,, la repetición del mismo las veces que sea necesario y la posibilidad de observar el movimiento de la articulación.

Recordar que el momento que se sugiere para la realización de la ecografía es a las seis semanas de vida y que tanto esta como la radiografía debe ser personal entrenado para su realización para realizar un diagnóstico eficaz y siempre tener en cuenta ante la menor duda consultar con el médico traumatólogo-ortopedista.

Dr. Orlando Gomez
Matr. Prov. 2812
Diagnóstico por Imágenes en Pediatría